"Fahrenheit 451"

Ray Bradbury
Precio: 8.95
Editorial: Minotauro
Número de páginas: 272
Distopía

<<El aquel momento, Clarisse McClellan dijo:
-¿No le importa que le haga preguntas? ¿Cuánto tiempo lleva trabajando de bombero?
-Desde que tenía veinte años, ahora hace ya diez años.
-¿Lee alguna vez alguno de los libros que quema?
Él se echó a reír.
-¡Está prohibido por la ley!
-¡Oh! Claro...>>
SINOPSIS

Fahrenheit 451: la temperatura a la que el papel se enciende y arde. Guy Montag es un bombero y el trabajo de un bombero es quemar libros, que están prohibidos porque son causa de discordia y sufrimiento. El Sabueso Mecánico del Departamento de Incendios, armado con una letal inyección hipodérmica, escoltado por helicópteros, está preparado para rastrear a los disidentes que aún conservan y leen libros. Como 1984, de George Orwell, como Un mundo feliz, de Aldous Huxley, Fahrenheit 451 describe una civilización occidental esclavizada por los medios, los tranquilizantes y el conformismo. La visión de Bradbury es asombrosamente profética: pantallas de televisión que ocupan paredes y exhiben folletines interactivos; avenidas donde los coches corren a 150 kilómetros por hora persiguiendo a peatones; una población que no escucha otra cosa que una insípida corriente de música y noticias transmitidas por unos diminutos auriculares insertados en las orejas.

MI OPINIÓN

Bradbury publicó este libro como crítica a la censura de libros en América y la quema de libros en la Alemania nazi: los buenos autores basan sus escritos en la realidad. Y este, en particular, no se queda en el pasado: con un despliegue impresionante lleva a la novela a un futuro venidero que, nos guste o no, puede suceder.

Escrito en tercera persona, este libro trata sobre la vida en un futuro próximo, un futuro en el que está prohibido leer ya que los libros hacen pensar, lo que lleva a las personas a sufrir, y la sociedad prefiere que las personas sean ignorantes pero felices a sabios e inquietos. En el futuro las casas son ignífugas, por lo que es imposible que se prendan fuego, de modo que los bomberos han dejado de apagar fuegos: ahora se dedican a empezarlos para quemar los libros que algunas personas aún esconden en sus casas.
El protagonista de esta distopía se llama Guy Montag. Montag es un bombero que disfruta su trabajo, no discute las normas y se considera feliz con su tonta mujer. Pero un día, cuando vuelve del trabajo, se encuentra con su nueva vecina, Clarisse, una chica de 17 años a la que le encanta hacer preguntas, observar... Clarisse y su familia son considerados unos antisociales porque se reúnen para charlar en vez de sentarse frente a la televisión durante horas. Y cuando Clarisse le pregunta a Montag si es feliz, toda la existencia de nuestro protagonista da un vuelco. Poco a poco, luchando contra sí mismo y contra lo que el sistema enseña, comienza a preguntarse qué tienen de especial los libros. Hasta que un día decide esconderse un libro dentro de la chaqueta... y desde ese momento nada volverá a ser igual

Este es un libro profético, una de esas historias que hacen reflexionar. Lo que sucede en la novela se puede imaginar perfectamente que pase en la sociedad de dentro de unos años, lo que creo que le da mucha credibilidad a la novela y hace que nos metamos aún más en la historia. Considero que la pluma del autor es uno de los puntos fuertes del libro: está escrito con un estilo impecable, casi poético, y muy fácil de leer. Otro punto fuerte de la novela es que el cambio que sufre Montag no se da de un día para otro, le vemos cambiar poco a poco de mentalidad.

Es uno de mis libros favoritos y lo recomiendo sin dudarlo: tanto si sois fans de la ciencia ficción, de las novelas filosóficas, de las distopías como si queréis pasar un buen rato, este es un gran libro que no os decepcionará.
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