Reseña de: "Sólo tú puedes salvar a la humanidad".

Terry Pratchett
Trilogía Las aventuras de Johnny Maxwell 1/3
Número de páginas: 172
Precio: ¿? (Descatalogado, espero que temporalmente).
Editorial Timunmas.
Juvenil fantástica.

«La inmensa mole de la nave principal de la flota enemiga estaba en un rincón de la pantalla. Nivel 10, allá vamos. Con cuidado, con cuidado. Atento… Ya no quedaban más naves, así que bastaría con mantenerse fuera de su alcance para bajar luego en picado sobre la nave y…

Queremos conversar.

Johnny parpadeó, incrédulo, al ver el mensaje en la pantalla».

SINOPSIS

Si no lo haces tú, entonces ¿quién?

La imponente tropa alienígena del último juego de ordenador desfila con estruendo por la pantalla, mientras, Johnny se prepara para hacerlos saltar en mil pedazos. De repente, aparece en la pantalla el siguiente mensaje: «Nos rendimos».

Pero, ¿qué demonios significa esto? Se supone que ellos no deberían poder hacer algo así y, además, los mandos no tienen botones de «no disparo»...

MI OPINIÓN

Cuando Johnny, tratando de escapar de la realidad, se pone a jugar a Sólo tú puedes salvar a la humanidad tratando de destruir hasta el último extraterrestre que salga en la pantalla, lo último que espera es recibir un mensaje que diga que estos se rinden. Y menos que más adelante estos se le comiencen a aparecer en sueños, interfiriendo en su ya de por sí complicada vida…

Sólo tú puedes salvar a la humanidad, escrito en tercera persona con el característico estilo de Pratchett que, aunque algo más suavizado y dedicado a un público juvenil, transmite de una forma sencilla, hábil y divertida una declaración filosófica acerca de la guerra, la paz y los estratos sociales, lo difícil de la vida en un mundo que a veces puede parecer muy grande y hostil; sin olvidar la crítica presente en todas sus novelas, esta vez acerca de cómo algo visto a través de una pantalla puede ser muy emocionante, pero solo hasta que uno se ve inmerso en ello.

Esta novela no tiene muchos personajes, pero los que hay están perfectamente definidos, tanto ellos como su función: son personas reales, de carne y hueso, con su historia y sus vidas, sus conflictos y virtudes. Son, sin duda, lo mejor del libro y en donde Pratchett refleja la sociedad y sus distintos estratos.
El protagonista es, de modo indiscutible, Johnny Maxwell, un chico de doce años que está pasando por una mala época: la situación en su casa no es buena ya que sus padres, al borde del divorcio, se encuentran ausentes física y emocionalmente, y él, en consecuencia, está muy desatendido. Johnny, que es un chico curioso y muy responsable, trata de mantenerse él mismo lo mejor que puede dada su situación, pero hay momentos en los que la evasión de la realidad gracias a los videojuegos que su amigo el Cojo le pasa parecen ser su único escape: cuando enciende el ordenador ya no hay más gritos, hay tranquilidad por fin. Es un personaje muy completo y tridimensional con el que es muy fácil llegar a empatizar.
El resto de personajes, secundarios pero claramente diferenciables, resultan de vital importancia para la trama. Se encuentran aquí sus amigos del colegio, con apodos de lo más curiosos y muy distintos en actitud y en el cómo se enfrentan al mundo real, que ayudan a conformar el estado social de la época: el Cojo (un chico con alma de hacker y experto en piratería informática, quien le da el juego a Johnny), Bigmac (hermano de un skinhead que trata de integrarse con esa banda para que no lo hagan pedazos, ladrón de coches y buen matemático), y El Serio (el intelectual del grupo, sensato, sereno y amplia fuente de conocimientos). También destaca como secundaria Sigouerny (o Kirsty, como prefiere que la llamen, una chica competitiva y segura de sí misma), que acaba teniendo un papel destacado en la historia, así como la capitana ScreeWee, la jefa del ejército ScreeWee que sólo busca la paz con los humanos a base del diálogo.

La trama de esta novela es sencilla, clara y directa, al igual que el mensaje que transmite. Ambientada en la época de la primera guerra del Golfo, cuenta la historia de Johnny, un niño que está pasando por una mala época de la que trata de evadirse jugando a videojuegos. El último de ellos, que le ha prestado su amigo el Cojo, es Sólo tú puedes salvar a la humanidad, en el que el jugador tiene que defender la Tierra ante el ataque alienígena del Imperio ScreeWee. Un juego como otro cualquiera. Sin embargo, mientras Johnny juega, un mensaje aparece en la pantalla: «Nos rendimos». Y desde ese momento, cada vez que se duerma, Johnny, con la responsabilidad de saberse que debe de ser el que les proteja y les ayude a llegar a su planeta, se verá frente a los mandos de su nave espacial, comandando la retirada de los ScreeWee y combatiendo a aquellos que les ataquen. Mientras el protagonista se enfrenta a un juego que parece muy real, en la televisión no dejan de aparecer imágenes de una guerra que parece un juego…

En esta novela y con el estilo claro, sarcástico y crítico que le caracteriza, Pratchett mezcla fantasía y realidad, denunciando las guerras y sus consecuencias en una historia antibélica y de conciliación: a pesar de la época en la que fue escrito y el tiempo del que habla es un libro muy actual que expone las ideas de forma clara; y cuyo punto fuerte, sin duda, son los personajes, claramente reales. Invita a los que lo leen a ponerse en el papel del otro sin renunciar en absoluto al humor al que tiene acostumbrado a su público, aunque tal vez de un modo más sosegado: no es una novela tan elaborada o profunda como pueden ser otras del autor, pero es mucho más directa y está llena de reflexión.
Es un libro que, sin duda alguna, se puede disfrutar a cualquier edad, una lectura ligera, amena e increíblemente ágil que muestra un trasfondo social muy complejo y una reflexión magnífica.

Agradecimientos especiales a mi genial amiga Marina, que rebuscó en cielo y tierra para conseguirme el ejemplar que yo llevaba años buscando. ¡Gracias, gracias!