Booktag: Cuentos clásicos.

¡Hola a todos! No sé si os habréis dado cuenta pero estoy algo desconectada de todo (de nuevo) y lo cierto es que no sé por qué. Soy lo peor, lo sé, pero este curso me tiene muerta. Voy a tratar de ponerme de nuevo al día con todo estas semanas que entran, y ya establezco un propósito que voy a tratar de cumplir. Dicho esto...

Esta semana toca un tag. Este tag lo vi hará meses en el blog de Chronicle&Cover de Jaime Ariza (pincha aquí para ver su entrada) y me llamó muchísimo la atención porque introducía las categorías con nombres de cuentos clásicos (vamos, por eso se llama así el tag, creo yo), así que no me pude resistir a él.

¿Preparados? ¡Allá va!

La Liebre y la Tortuga: Un libro que leíste muy rápido y otro que tardaste en leer.

 

Como liebre: “Maldito karma”, de David Safier. Un libro magnífico, si me pedís opinión, y divertido como pocos. Me reí en voz alta varias veces mientras lo leía por la calle, cosa buena porque me lo estaba pasando pipa. Cosa mala porque me miraron raro, pero… ¡bah!

Como tortuga: “Rhadopis la cortesana”, de Naguib Mahfuz. La verdad es que aunque me suelen gustar este tipo de novelas históricas enfocadas en Egipto no soportaba a Rhadopis, así que me costó acabarlo. (¡pero lo hice!).

Los Tres Cerditos: Trilogía o saga que al principio no te convencía pero finalmente ganó tu corazón.

La trilogía del Ciclo de la Luna Roja, de Antonio Cotrina (primer libro reseñado aquí). Fui muy reacia a leérmelos, no sé por qué (creo que porque dos de mis amigas me acosaron, literalmente, para que me lo leyera, y yo por llevar la contraria…). Sin embargo cuando claudiqué y me los leí por fin me encantaron.

Blancanieves: un libro del que tenías altas expectativas y al final terminaste odiando.

“Ciudades de papel” de John Green. Había leído buenas reseñas de la novela, pero a mí me pareció algo plana. También he de confesar que a mi este autor no me gusta demasiado, y mira que he intentado disfrutar de sus libros, pero no hay modo. Vale, no es odio como tal porque en general no odio a un libro, no tiene sentido, pero que no, que no le pillo el punto y no entiendo a qué viene tanto jaleo con este escritor.

Peter Pan: un libro que has leído varias veces y del que nunca jamás te cansarás.

“Por no mencionar al perro”, de Connie Willis. Magnífico. Es una escritora impecable, y a la que si no habéis leído os recomiendo encarecidamente. Maravilloso, reiréis y lloraréis... no lo puedo recomendar más, de verdad.

Pinocho: un libro con el que te sentiste engañada, pensabas que sería de una forma y fue totalmente diferente.

“Meg”, de Steve Alten (reseña aquí). Eso sí, no me sentí engañada (básicamente porque no me leí la sinopsis ni miré la portada, fui a la aventura), simplemente me llevé un sorpresón al descubrir que en vez de ir sobre una chica victoriana llamada Meg (no preguntéis porqué pensaba eso... yo tampoco lo entiendo) iba sobre un megalodon (ya sabéis, ese tiburón gigante y peligrosísimo extinto desde hace mucho tiempo). Por supuesto, me encantó. El resto de la saga es más bien decepcionante, pero “Meg” está muy bien escrito y además puede pasar por libro autoconclusivo, así que por mí perfecto.

La Dama y el Vagabundo: tu romance literario favorito.

Tessa, Will y Jem, de “Cazadores de Sombras: los orígenes” son unos de mis preferidos. No es exactamente un romance al uso, pero lo es, pero no lo es… bah, el caso es que me encanta. Les amo mucho y algún día conseguiré sacarles del libro y que sean mis amigos. Aunque eso sí, nunca me los he imaginado como en las portadas. En mi imaginación molan mil más.

Alicia en el país de las maravillas: Un mundo literario en el que te gustaría vivir.

Me encantaría vivir en Mundodisco (de la serie de Mundodisco de Terry Pratchett [vaya, qué raro, Camino ha mencionado a Terry, si eso nunca pasa en este blog]), y en particular en Ank-Morpork. O en Lancre, la verdad es que no estoy muy segura. Pero seguro que me lo pasaba pipa, porque lo que no pase en ese mundo... Además, vivir encima de un disco cargado sobre los hombros de cuatro elefantes gigantes de pie sobre el caparazón de una tortuga gigante llamada Gran A’Tuin que viaja por el universo tiene cierta clase. No me digáis que no.

La Cenicienta: Un libro que a todo el mundo le gusta pero que tú odias.

Por lo que he leído en algunas reseñas parece ser que a muchísima gente le ha gustado “Prohibido”, de Thabitha Suzuma (reseña aquí) mientras que yo lo he detestado con toda mi alma por la justificación que tiene todo el asunto. Seré sincera, me pareció una patochada como una casa. Pero para gustos…

El Flautista de Hamelin: Libro que leíste porque estaba de moda.

“En tiempos de guerra”, de Mariah Evans (vale, no sé si está de moda. ¿Lo está? Lo vi hace un tiempo por los blogs... Bueno, daré por hecho que sí, que está de moda). Y me gustó mucho, así que me alegro de haberlo hecho: creo que la parte sociohistórica está muy bien trabajada y eso siempre me encanta. 

Tarzán: Un libro poco conocido que descubriste por casualidad.

No sé si será poco o muy conocido, pero creo que entre la gente así más joven no se conoce mucho (aunque puedo estar equivocada). Y son los libros de la serie de de Tarzán de los monos, de Edgar Rice Burroughs (¡menuda coincidencia, eh! :D), unos libros que me encantan. En realidad tampoco fue por casualidad, fue un día que estaba curioseando por la biblioteca de mi padre y me dijo “Mira, tienes que leerte estos libros”. El resto es historia.

La Sirenita: Un libro que te dejó sin palabras.

“El libro del día del Juicio Final” de Connie Willis (a la que ya he mencionado más arriba, por cierto). Fantástico. Impresionante. No tengo más que decir excepto que si podéis le echéis un ojo porque no os vais a arrepentir.

Y aquí acaba este tag. Si os ha gustado podéis cogerlo tranquilamente. Nos leemos la semana que viene. ¡Hasta entonces!